Las personas tenemos diferentes maneras de pensar, de hablar, de expresar nuestras emociones, de actuar, de reaccionar ante la adversidad y de gozar la vida. El ser humano es una clase de guerrero que se enfrenta a todo, donde cada uno saca lo mejor de sí para lograr salir victoriosos de las batallas.
El autoconocimiento, como su nombre lo dice, significa conocerse a sí mismo de manera profunda e íntima, debido a que para poder conocer y entender el mundo exterior debemos conocernos primero a nosotros mismos. Es a través del autoconocimiento que descubriremos quienes somos, qué queremos y dónde queremos estar.
Cualquier actividad que realicemos en la vida, debería implicar saber qué se está haciendo y por qué. Todos tenemos un propósito en la vida y para lograrlo debemos saber con qué contamos, que tenemos, que nos falta, para qué somos bueno, cuáles son nuestras debilidades y nuestras fortalezas.
Este tipo de conocimiento sobre nosotros incluye los sentimientos, pensamientos, así como la influencia que tienen estos en nuestra conducta. Asimismo, tiene que ver con conocer las motivaciones, necesidades, deseos, opiniones, puntos de vista, valores, ética, entre otros. Esto es la esencia de conocerse completamente.
El autoconocimiento es importante, debido a que ayuda a las personas a percibir mejor la forma de reaccionar ante alguna situación, a conocer qué es lo que desean en la vida, a entenderse y tener control sobre su propia vida.
Sin embargo, éste no se logra de un día para otro, porque debe convertirse en un hábito y para ello puedes comenzar por observarte a ti mismo, observa cómo es tu reacción ante distintas situaciones, personas y lugares e intenta comprender el motivo de tu reacción y que hay detrás de ella.
El autoconocimiento, también es una forma de felicidad, debido a que esto nos proporciona libertad y control sobre nosotros mismos y las situaciones, pudiendo elegir en todo momento que queremos hacer con nuestros sentimientos.
Estar consciente de nuestras emociones es fundamental, porque ellas nos ayudan a relacionarnos con otras personas, saber lo que queremos y tomar decisiones. No obstante, hasta las emociones que consideramos negativas (ira, rabia, tristeza, rencor, envidia, culpa, frustración, temor) pueden ayudarnos a comprender a otras personas y a nosotros mismos.
Parece mentira, pero es impresionante ver cuántos de nosotros no somos consciente de nuestras emociones hasta que han pasado, conociendo que muchas veces las cosas que hacemos están controladas por esas emociones.
Es importante trabajar el autoconocimiento, para lograr el equilibrio interno y el bienestar emocional, tomando en cuenta que el autoconocimiento es una de las claves del desarrollo personal y el principio básico para poder regular las emociones, relacionarse con los demás y trabajar para lograr los objetivos.
El autoconocimiento es la pieza fundamental para el bienestar psicológico de las personas, porque aquellas que se conocen mejor saben lo que quieren en la vida y saben gestionar sus emociones incluso en momentos de mayor dificultad.
Lo más importante es que a la hora de tomar decisiones sepas realmente quien eres y qué quieres. Recuerda que nunca terminamos de conocernos a nosotros mismos y ésta es la esencia de la vida, la cual nos sorprende cada día y nos hace reaccionar para seguir avanzando.
Siempre tendremos detalles que descubrir y matices que harán que tengamos una experiencia enriquecedora.
“De todos los conocimientos posibles, el más sabio y útil es conocerse a sí mismo”
William Shakespeare
Muy acertado “De todos los conocimientos posibles, el más sabio y útil es conocerse a sí mismo”
ResponderEliminarGracias, Yerlin por tu comentario. Saludos
Eliminar