lunes, 28 de febrero de 2022

¿CÓMO ALEJARSE DE LAS PERSONAS TÓXICAS?

Lo primero que debemos hacer para alejarnos de las personas tóxicas es aprender a reconocerlas. Y, aunque nos duela mucho apartarlas de nuestra vida, debemos tener claro que es la única manera de poder crecer y avanzar.

Todos en algún momento hemos tenido amigos, familiares y parejas tóxicas, que nos han afectado emocionalmente, sin embargo, todo en la vida nos sirve de experiencia. 

La vida es demasiado corta y mucho más hermosa de lo imaginado, como para sumarle más peso a nuestros hombros. Existen conductas en muchas personas que nos perjudican progresivamente. Son las llamadas “personas tóxicas” y es prudente que aprendamos a alejarnos de ellas antes que perturben nuestra paz y tranquilidad.

En este artículo señalo algunas pautas que te ayudarán a diferenciar a esas personas tóxicas que nos rodean.  El hecho de ser cortés y educado, no impide que le pongamos un freno a este tipo de personas y distanciarnos de ellas. Recuerda que nadie está obligado a tolerar las vibraciones negativas de los demás, porque esto sólo trae problemas y preocupaciones. Por ello, aprende a decir no y vive tu vida como te plazca. 

Algunos perfiles psicológicos de las personas tóxicas:

Es importante, tomar en cuenta que no podemos catalogar de personas tóxicas a cualquiera con quien tengamos alguna discusión o nos contradiga en algo, debido a que la persona tóxica va mucho más allá de un simple conflicto de personalidades.

También, siempre deberíamos ser críticos con nosotros mismos, y preguntarnos si hemos estado actuando como personas tóxicas en nuestro grupo familiar y de amistades. 

En nuestro círculo, siempre nos vamos a encontrar con el violento. Y, aunque es difícil asimilarlo, más aún cuando se trata de alguna persona a quien queremos y apreciamos, debemos reconocer que hay personas malas y gozan causando dolor. Existen muchos grados de violencia que van creciendo de maneras muy diferentes, tanto es así, que un comportamiento agresivo puede llegar a mirarse como algo normal y comprensible. Pero, la realidad es distinta.

Por ello, aunque sea un familiar, amigo o la propia pareja, es fundamental cortar de raíz y no aceptar ese tipo de conductas. No justifiques los gritos, los insultos o las agresiones. Hazte una vida libre del mal humor, la ira, la intimidación y los maltratos. 

Algunos tipos de personas tóxicas:

El “sanguijuela”

Este tipo de comportamiento podría distinguirse como el egoísmo en su máxima expresión. Estas personas aplican la famosa ley del embudo “lo ancho para ellos y lo estrecho para ti”. Te buscan sólo cuando necesitan algo.Es importante descubrirlos rápido y ponerles freno inmediatamente. 

El negativo

Las personas negativas pueden ser como “vampiros energéticos”, porque absorben nuestra energía y nuestro ánimo y aunque se les presenten buenas oportunidades, todo lo viven como un problema o dificultad. Son expertos en meter miedo. Por ejemplo, si tienes planificado un viaje, te inyectan tanto el peligro que terminarás creyendo que el avión se caerá. 

El deudor

Tener una mala racha económica, no es criticable ni significa que sea una persona tóxica. Sin embargo, cuando te evaden para no devolverte lo prestado comienza el conflicto. Las excusas toman las riendas y la persona nunca dará la cara para no asumir su responsabilidad. 

Este tipo de personas se descubren con facilidad cuando te das cuenta que no tienen la mínima intención de devolverte tu dinero, pero, sin embargo, se permiten realizar otros gastos.

El envidioso

No existe nada más venenoso que tener a un envidioso como amigo. Este tipo de persona nunca se alegrará de tus éxitos, todo lo contrario, le carcome la envidia. El envidioso, es un acumulador de resentimiento, por ello, tarde o temprano se convertirá en un traidor. 

El envidioso siempre realza la vida de los demás y suele tener complejo de inferioridad. Son muchas cosas que pueden causar envidia, como: una posición social, una bonita relación de pareja, una suerte del destino, la belleza, una propiedad…

Tips para alejarse de las personas tóxicas

Haz lo máximo que puedas por mantener tu criterio y no justificar los comportamientos tóxicos. 

No confíes en quien no sepa guardar un secreto.

Nunca te consideres por debajo de nadie ni de lo que mereces.

Recuerda que, quien habla mal de otro contigo, con otro hablará mal de ti.

Aléjate de los grupos que nada bueno te puedan aportar.

Enfrenta las situaciones de frente y con firmeza.

No confíes en quien pisó a otro para escalar.

Cada quien es dueño de su vida, no obstante, te recomiendo alejarte de aquellas personas que no te  aportarán nada productivo. Si tienes cerca a personas tóxicas, aléjate de ellas lo antes posible. Los tips mencionados te pueden ayudar. 


martes, 15 de febrero de 2022

 EL CIRCULO DE LA VIDA

Cuando dibujamos un círculo nunca lo dejamos abierto, porque se trata de una figura geométrica. Pero, el círculo de la vida es mucho más que una figura, es una forma de conectar con la vida y con nuestro ser. Es mirar nuestro interior y promover la inclusión, el encuentro, la conexión, la inteligencia, la razón. Mientras estemos vivos, el círculo permanecerá abierto a la libertad, al amor, a las enseñanzas, a las aventuras, al éxito, a disfrutar y vivir a plenitud cada etapa sin mirar hacia atrás. Dejar el círculo abierto significa que todos pueden entrar y salir cuando así lo decidan.

El círculo de la vida es una representación simbólica del nacimiento, la supervivencia y la muerte.  Algunas ruedas o círculos son considerablemente más complejos que otros. El ser humano, nace, crece, se reproduce y muere. Las etapas de la vida son ciclos que obligatoriamente debemos cerrar, aquí no hay vuelta atrás. Un día somos niños y al poco tiempo ya estamos en la etapa de adulto mayor. Es por ello, que debemos estar atentos y no desperdiciar el tiempo en cosas que no valen la pena. 

Por otra parte, muchas veces nos estancamos en un ciclo por miedo a cerrarlo. Ejemplo cuando estamos en una relación de pareja y queremos que todo funcione, a pesar de saber que hay situaciones que no podemos cambiar, sino que debemos aceptar para cerrar ciclos y dejar el círculo abierto para otras oportunidades. Lo importante es encontrar nuestra paz interior y mantener nuestro círculo activo y prepararnos para vivir en plenitud, encontrar nuestra paz interior para vivir la vida en equilibrio y continuar disfrutando de cada una de nuestras etapas de la vida. 

Recuerda que, la vida es circular, todo tiene una causa y un efecto, por lo tanto, debemos responsabilizarnos ante las consecuencias que puedan acarrear nuestras buenas o malas acciones en la vida. 

Lo bueno de nuestro círculo de vida es que lo podemos colorear como mejor nos plazca. Teniendo presente lo hermoso que somos, y lo dichosa que puede ser la vida cuando estamos en el momento presente. Sólo debemos mantener un equilibrio para que nuestro circulo gire libremente, porque de lo contrario se quedará estancado en algún lugar y sólo volverá a girar cuando aceptemos la realidad y le demos entrada a nuevas oportunidades. 

El círculo de la vida está conformado por parcelas (salud, amor, familia, educación, trabajo, diversión, amigos...). Pero, como cada persona es única, su círculo de vida también lo es, por eso cada quien dividirá su circulo con las parcelas que considere necesario y del mismo modo le dará la prioridad a cada una de ellas. Lo importante es hacer girar el círculo sin que éste pierda el equilibrio. 

Mientras estemos vivos nuestro círculo estará en movimiento, eliminando algunas parcelas e incluyendo otras. 

Te invito a girar tu círculo de vida con las parcelas que te hagan feliz. 


sábado, 12 de febrero de 2022

MI BOTIQUÍN DE PRIMEROS AUXILIOS







Todos tenemos un botiquín de primeros auxilios en casa. Y, no sólo en casa, hasta en nuestra cartera siempre metemos algún medicamento que utilizamos con frecuencia. Un analgésico, antialérgico, pastillas para la presión arterial, en fin, algo que nosotros consideramos indispensable tenerlo. Sin embargo, existen medicamentos que no se consiguen en la farmacia, debido a que están a nuestro alcance y lo mejor de todo es, que no cuestan nada.

Cuando sentimos malestar de cabeza, enseguida nos tomamos un analgésico y esto lo hacemos de forma automática. No lo pensamos mucho. Y, así nos vamos automedicando sin darnos cuenta que muchas veces lo que necesitamos son otras dosis que nos permitan aliviar el estrés o tal vez las pruebas que la vida nos presenta día tras día.

«¿Qué pasa si el dolor, como el amor, es solo un lugar que visitan los valientes?» ~ Glennon Doyle

 Cuando la vida es fácil todo es color de rosas, pero cuando la vida es dura, todo parece difícil. 

La vida nos regala diferentes momentos, no todo en la vida es felicidad, ni tristezas, debe haber un equilibrio entre el bien y el mal. Si todo fuese felicidad, entonces cómo conoceríamos los sinsabores de la vida, esos que nos hacen crecer y nos permiten conocer para qué somos buenos, que nos hacen descubrir nuestro propósito, que nos llevan a callejones oscuros para que descubramos por nosotros mismos donde encontrar la luz. 

Por estas razones, vamos equipando nuestro botiquín de primeros auxilios para cuando se nos presenten diversas situaciones saber que debemos hacer para enfrentarla y salir adelante. Estos medicamentos, como ya lo mencioné, no los encontramos en las farmacias, están a nuestro alcance y es la experiencia de vida la cual nos los ha regalado. Los hemos adquirido con el pasar de los años, a través de vivencias, porque no existe mejor maestro y remedio que el tiempo. 

Cada quien irá surtiendo su botiquín de acuerdo a sus emociones, debido a que éstas juegan un papel importante en la vida, porque son las que determinan nuestra conducta. 

A medida que la vida nos va enseñando, vamos adquiriendo consciencia y esto nos va a permitir ser mejores personas. 

Cuando comencé a llenar mi botiquín de primeros auxilios pude darme cuenta que en la vida necesitamos más que un medicamento para sanar enfermedades, porque muchas veces las enfermedades nos las ocasionamos nosotros mismos. 

Por ejemplo, la envidia causa malestar, porque ese sentimiento que se tiene hacia el bien ajeno, es dañino. Pero, al mismo tiempo si lo vemos desde otra perspectiva, puede ser una razón para estar motivado. Por ello, en lugar de rechazarla, debemos escucharla y convertirla en nuestra alidada para conseguir los objetivos deseados. La medicina para controlarla no se compra, es gratis y sólo nosotros podemos curarla analizando el origen de ese sentimiento, madurando nuestra personalidad, no comparándonos con nadie, valorando lo que tenemos, poniéndonos en el lugar y lo más importante confiando en nosotros mismos sin subestimarnos ni sobrevalorarnos.

Y, así como la envidia, también existen otros sentimientos que debemos aprender a controlar, porque de lo contrario nuestro mundo interior estará saturado y seremos nosotros los únicos responsables de su desplome. 

Comienza a llenar tu botiquín de primeros auxilios con buena energía, actitud positiva, empatía, solidaridad, lealtad, humildad, honestidad y todos aquellos valores que consideres necesario. Mantenlo al día. Revísalo de vez en cuando, recuerda qué, así como las medicinas se vencen, también debemos echarle un vistazo a lo que tenemos para ir mejorando y seleccionar aquello que debemos tener como reserva.